viernes, 11 de enero de 2013

La amenaza amarilla

Qué  recuerdos me trae a la memoria mi más tierna infancia.Aquellos en los que estudiábamos geografía e historia todo juntito para no desaprovechar el libro.
De China me enseñaron más bien poco, es lógico, un país comunista no estaba muy bien visto que digamos por el régimen franquista, por eso, sólo de pasada me dijeron que eran un montón de gente de color amarillo. Nada más.
No me hablaron de que eran tan extremadamente laboriosos y listos,   capaces de invadir  a cualquier población sin pegar un tiro, o matarnos lentamente por culpa de nuestras debilidades y la flojedad de los gobernantes.
Silenciosos, sonrientes, serviciales hasta la extenuación, empezaron a conquistarnos con sus restaurantes pintorescos, con paredes  llenas de dragones y lagartos borrachos metidos en botellas, sopas de aleta de tiburón y cerdo agridulce.
La curiosidad mató al gato, y a nosotros nos empezaron a matar por el estómago . Apenas nos dimos cuenta de que era una primera avanzadilla de lo que llegaría después.
Las famosas tiendas de 20 duros, hoy de un euro,  fueron un auténtico bombazo. ¿Quién no ha comprado en una de ellas?, creo que nadie. Nadie se quiso dar cuenta de que, de un día para otro, aumentaron los precios un 66%, nosotros somos más chulos que nadie y aceptamos sin rechistar.  Todos hemos terminado echando un vistazo a esas embutidas estanterías en las que puedes encontrar cualquier cosa que necesites y a un precio relativamente razonable.
¿El truco?, que no pagan los mismos impuestos que los autóctonos, a esos que el estado sangra cada día más y más y que acabará por echarnos a todos,  menos a ellos, en un cubo de la basura llamado paro.
Cachivaches estrambóticos, santos que más bien parecen Drag Queens, zapatos que te destrozan los pies, o ropa que te dura un lavado, se han convertido en el refugio de los pobres cuando no te puedes permitir ir de compras al Corte Inglés.
En cualquier ciudad, pueblo, barrio o callejuela que se precie,  te tropiezas con esos almacenes atestados en los que apenas pasa una persona por pasillo, te puedes estar un día completo como en un museo, recreándote en la cantidad de cosas servibles e inservibles que nos ponen a la vista.
Las tiendas de regalo de toda la vida pasaron lentamente a la historia. Esta vez nos mataron por chafarderos y agarraos.
Cuando este negocio ya estaba en marcha se sacaron de la manga las tiendas de comestibles, abiertas todos los días y a todas horas, y con un servicio tal, que hasta  llevan las bebidas y los cubitos de hielo a domicilio, sea cual sea, donde haya un botellón.
Los pequeños colmados de barrio fueron cerrando… otra vez nos mataron por cómodos.
También se han puesto de moda las peluquerías, con o sin, final feliz. Amén de que son unos copiadores excelentes te cortan el pelo por 6 euros y encima no te dan la brasa, casi ninguno habla castellano y nosotros andamos fatal de chino mandarín, así que 10 minutos y a la puta calle.
Las peluquerías y barberías se van apagando, nos matan por roñosos y traidores a nuestro peluquero de siempre.
Hace poco llegaron los Wok, donde puedes zumbarte una barbaridad de platos por un precio único. ¡Todo lo que usted pueda comer!, claro que de la sal de frutas que te tienes que tomar después no te dicen nada. Eso sí, comer hasta reventar por unos 10 euros incluyendo gambas nos ha hecho abandonar los restaurantes tradicionales. Más gente al paro, y más chinos importados.
Últimamente te sorprenden en cualquier bar de tapas, hasta eso han copiado, y son capaces de hacerte una de bravas que te deja la boca dormida, lo que te obliga a tomar otra cervecita para despejar el escozor de la garganta, y venga, otro negocio que ha pasado a manos chinitas.
Las tiendas de ropa son como un mercadillo pero con perchas.  Los modelos parecen sacados de los años 40, pero… claro son tan baratos!! Y ahí estamos, cerrando tiendas por todas partes porque no se puede competir con ellos.
La ropa es horrorosa, de pésima calidad, atrasada, y para colmo todo el barrio cercano al chino va vestida igual, a veces, si te fijas, cuando la gente pasea por la acera parece la excursión de un colegio.
La guinda del pastel es que todo lo que venden es importado de China, por lo que nuestras fábricas han visto como la producción baja y baja, tanto que muchas han tenido que echar el cerrojo y a otra cosa mariposa.
Total, que a la china callando nos han ido mandando al paro, mientras ellos abren cada día más y más locales, y más grandes, tanto que deberían darnos una cuerda para atar a los niños y no perderlos por los interminables pasillos.
Mucho me temo que esto es sólo el principio, cualquier día pillas un taxi y un sonriente chinito te dice “a donde señol”, o dentro de ná el alcalde de tu pueblo tiene los ojos de estreñío, o quizá, un mañana no muy lejano, Planeta Agostini sacará una colección, aprenda chino en 200 lecciones.
Visto lo visto el futuro no es negro, es amarillo como un limón, terminaremos trabajando, si queremos salir del paro, en un negocio chino que se llevará los dineros a la China y que poco a poco comprará el mundo y yo me arrepentiré de,  que en mi escuela no me explicaran más sobre esta raza silenciosa, abnegada y sonriente que empezó dándome a probar arroz frito tres delicias y acabará siendo mi presidente de gobierno.
Alertados estais, huid de esa gente que no se ve venir, pero que…. Ya están aquí……

2 comentarios:

  1. Qué razón tienes... más que un Santo!!!
    Son como una carcoma! van poco a poco...no te das cuenta... y se lo van comiendo todo... es una lástima que se sigan permitiendo el lujo de no pagar impuestos... claro... así cualquiera tiene negocios!!!! y no uno no... doscientos!! pero claro... a mi, pobre desgraciada, se me ocurre abrir una tiendecita para sacar a mi familia adelante, y más que a mi familia, saco al Estado, que se sacan impuestos hasta por tirarte un pedo dentro de la tienda y contaminar el ambiente... o si no, tienen la genial idea de subirte el Iva!!!! claro!!! es que a los chinos no les afecta! se me olvidaba!!!! porque cojones hacienda no mete las narices y hace inspecciones en los poligonos atestados de chinos al por mayor?????? allí nadie paga ivas!!!! en fin... como siempre es mejor freir a los autónomos o a los pobres comercios que se matan por ganar cuatro duros... de los cuales, cuatro, van para pagar impuestos.
    Triste...pero cierto... y esto no ha hecho más que empezar....

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    1. Gracias por tu comentario, es verdad, la puntilla a los pequeños comercios ha sido el IVA, y mientras, los chinitos se llevan los dineros a blanquear lejos de las garras de la hacienda "pública" del estado.
      Así nos va y peor nos irá mientras la gentuza que nos gobierne no ponga los güebos encima de la mesa y los frían a ellos igual que a nosotros.
      ¿A qué esperan? quizá hay intereses que el pueblo llano no alcanzamos a entender, o simplemente no les interesa que los comerciantes saquen la cabeza, sólo quieren hundirnos a costa de los beneficios fiscales que reciben estos negociantes que sí consiguen salir adelante y que no entendemos porqué.
      Sólo nos queda evitarlos, a ver si la próxima vez veo a algún chinito en la cola del INEM.

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