jueves, 15 de noviembre de 2012

14 N

14 N
Que estamos indignados, nadie lo pone en duda, que estamos fastidiados, sin vacilación, que tenemos derecho a defender nuestro futuro … Algunos creen que NO.
Yo, personalmente, estoy muy, pero que muy cabreada.
Están borrando a golpe de decreto todo lo que el pueblo llano ha conseguido con lucha y esfuerzo, dejando a nuestros hijos en la más absoluta de las indefensiones, y lo peor de todo, sin un futuro cierto.
Aún recuerdo, de mis tiempos de “rojilla” las huelgas ilegales, jugándonos el tipo, pidiendo a gritos mejores condiciones laborales,  mejor sanidad, mejor educación… libertad de expresión, libertad de pensamiento….
Aquellas cargas de los “grises” que nos aceleraban el corazón y nos aligeraban las piernas, y que, en contadas ocasiones, llegábamos sanos a casa. Siempre había una pelota de goma que nos golpeaba en algún sitio, y que lucíamos, a modo de moratón, con el orgullo de haber participado en defensa de nuestros derechos.
De eso hace una eternidad, y aún vivía el gran dictador. Ahora, últimamente he vuelto a ver las cargas policiales y se me ha estremecido el alma.
Yo, inocente de mí, pensé que todo eso, por lo que yo había luchado, estaba asegurado para siempre,  y que viviendo en Democracia, eso jamás volvería a ocurrir.
Craso error, parece ser que hemos vuelto a los tiempos en los que pedir trabajo, vivienda, educación digna o sanidad libre y gratuita para todos  es poco menos que dar un golpe de estado.
Ayer no se paralizó el País. Como demonios se iba a parar si la mayoría tenemos el empleo pendiente de un hilo, si, sin razón alguna, gracias a  la nueva de ley, nos pueden dar una patada en el culo y dejarnos en la puñetera calle.
No se detuvo España. Gol de penalti para Mariano.
La tarde sí, la tarde fue del pueblo.
Cientos de miles de indignados recorrieron las ciudades creando, con su presencia, un grito unánime que nos representa a todos los que no estamos dispuestos a morir de rodillas.
Compañeros de la industria, sanidad, educación, transporte… todos dispuestos a recuperar unos derechos que nos han usurpado y que no tienen ninguna intención de devolver.
La manifestación sí fue un éxito. Claro está, dependiendo de quién lo cuente.
Hoy llega el baile de cifras, según algunos medios de comunicación fueron cuatro gatos, según los convocantes, que no sólo fueron los sindicatos mayoritarios, sino casi un centenar de organizaciones no sindicales, fue absolutamente multitudinaria, basta únicamente con ver las imágenes.
La delegada del gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, siempre barriendo para casa, dice que 35.000 madrileños fueron a la plaza de Colón.
Yo alucino de cómo esta plaza estira y encoge dependiendo de quién se manifieste. Hace unos meses, el sr. Rouco celebró una misa en la misma plaza y los asistentes fueron más de medio millón de personas, claro que se trataba de una manifestación encubierta contra el aborto y el matrimonio homosexual, no contra un pésimo gobierno.
En Barcelona, tres cuartos de lo mismo. Hay quien cifra en un millón de personas a los asistentes,  mientras las fuentes oficiales dan un resultado de 110.000.
Y me pregunto ¿Cómo coño cuentan?
Claro,  que si que algunos psudoperiodistas habían hecho la crónica, anunciando el fracaso absoluto de la huelga, un día antes, ¿Qué podemos esperar?
Hoy, seguramente los azules dirán que fue un fracaso,  que los cuatro gatos que salieron ayer no representan a la mayoría, y que,  los que por desgracia no pudimos asistir, somos partidarios de los recortes.
No, no Marianico, conmigo no cuentes!
El no estar presente no significa que comulgue con las ruedas de molino que nos das a diario, es más, si tan seguro estás… ¿porqué no convocas elecciones?

Se me quedan muchas cosas en el tintero… pero mañana será otro día

1 comentario:

  1. Que asco de política y de políticos. Volvemos al ciclo del dictador, vuelven los grises de otro color; lo que nunca debía volver a pasar está pasando. Este país se va a la p. m.
    Nadie de esta gentuza me representa.
    Sigo en que no quiero ser española!

    ResponderEliminar